miércoles, julio 04, 2007

Ella hacia el Este

Cuando el cuerpo no espera
lo que llaman amor


Algo me delata.

Cada vez que te veo quedo arrasada por fuerzas que exceden mi poder. Quedás palpitando en mí. Traté de decirte de mil maneras todo, con miradas, gestos, abrazos, voces, pistas, simulacro.
Cien años de lluvias, o cien años de fuego, me digo. Ni eso puede borrar lo que siento esta tarde, metálica y siniestra. Hoy no escribo en clave, te escribo porque te quiero, porque tu voz cambia pero sos siempre el mismo, encantador, destructivo, invaluable.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ni, cien años de lluvias, ni cien años de fuego. Yo elegiría 100 años de Soledad.

Anónimo dijo...

cien años de amor, de amor, de amar, amor quema y moja, amor es todo, quién será, quién, quién es el otro del diario, quién es quién, quién es ella, a quién le escribe, qué lobo, qué cuerpo no esperaba lo que llaman amor, quién sabe dar, no se pueden vivir los mismos días, "querés que todos los días sean como lo que leés y no podés escribir, aprender a vivir: pero vivir y aprender, dar y esperar tu turno, o te incendiás".