Hoy trasnoche.
Pasan las horas y el milagro duerme. Duerme, pero los números siguen pasando. Pasaron los miles, lo que ya debería contarse como milagro número 1. Se suman los comentarios, los amigos anónimos, las charlas transatlánticas en busca de un paraíso inexistente. Vuelvo a entrar a ver si el moderador ya subió los últimos post. No, demasiado pronto. La gente también duerme.
Mientras espero sigo con la tele muda, la guitarra cerca, los cigarrillos listos y de fondo alguien cantando algo sobre ser el otro lado del mundo. Busco en youtube y aparece un montón de gente tocando en sus casas. Pienso, a esta altura ya debería tocar mejor. Y qué tal si un día de estos en vez de escribir charlas gastadas me dedico a subir canciones, hm, mala idea, pero no creo que sea peor que ésta.
Sigo esperando. Le mando un mail al moderador para que incluya algún banner en la página. Necesito dormir, pero estoy eufórico, poseído. ¿Qué hacer? Sigo navegando. Me encuentro con que ahora las estrellas ya ni tienen que esperar a salir por la tele, salen desde su casa vía internet. Dios, digo por decir algo, qué rápido que va esto y qué viejo me estoy quedando. De nuevo me puteo por no saber hacer nada bien.
La calle va cobrando vida y yo me voy quedando sin nafta. La espalda me está matando, los ojos me arden y ya la cama vacía me tienta. Y pienso, ¿esto es lo mejor que podés hacer? No espero respuesta. Vas a ver que mañana Ella, mientras se prepara un café y se acomoda el pelo te crea un paraíso de la nada, con tan sólo nombrarlo. Un paraíso a 5 horas de España. Yo lo único que espero es encontrar el mío mucho más cerca. Cercano al milagro.
Buenos Aires, Domingo 10 am.
Pasan las horas y el milagro duerme. Duerme, pero los números siguen pasando. Pasaron los miles, lo que ya debería contarse como milagro número 1. Se suman los comentarios, los amigos anónimos, las charlas transatlánticas en busca de un paraíso inexistente. Vuelvo a entrar a ver si el moderador ya subió los últimos post. No, demasiado pronto. La gente también duerme.
Mientras espero sigo con la tele muda, la guitarra cerca, los cigarrillos listos y de fondo alguien cantando algo sobre ser el otro lado del mundo. Busco en youtube y aparece un montón de gente tocando en sus casas. Pienso, a esta altura ya debería tocar mejor. Y qué tal si un día de estos en vez de escribir charlas gastadas me dedico a subir canciones, hm, mala idea, pero no creo que sea peor que ésta.
Sigo esperando. Le mando un mail al moderador para que incluya algún banner en la página. Necesito dormir, pero estoy eufórico, poseído. ¿Qué hacer? Sigo navegando. Me encuentro con que ahora las estrellas ya ni tienen que esperar a salir por la tele, salen desde su casa vía internet. Dios, digo por decir algo, qué rápido que va esto y qué viejo me estoy quedando. De nuevo me puteo por no saber hacer nada bien.
La calle va cobrando vida y yo me voy quedando sin nafta. La espalda me está matando, los ojos me arden y ya la cama vacía me tienta. Y pienso, ¿esto es lo mejor que podés hacer? No espero respuesta. Vas a ver que mañana Ella, mientras se prepara un café y se acomoda el pelo te crea un paraíso de la nada, con tan sólo nombrarlo. Un paraíso a 5 horas de España. Yo lo único que espero es encontrar el mío mucho más cerca. Cercano al milagro.
Buenos Aires, Domingo 10 am.
[aunque para mí siga siendo Sábado a la noche].
5 comentarios:
Un buen vino. Y un poco de esperanza.
Hacen milagros.
Estoy rodeada por todos ustedes, no sè si alegrarme o huir.
Besos
Huir parece lo más acertado
E.O.D.D.,
A esas horas fluyen las ideas, dispersas por cierto. Hoy es lunes y son las cinco y media de la tarde aquí en España (una hora menos en Canarias, Portugal y el Reino Unido)... Ya ves: el paraíso queda tan cerca y tan lejos. Depende desde donde quieras llegar. De todas formas Ella nos situó en Islandia. Pero existen tantos paraísos como querramos tener.
¿Cuál es el mío? Ahora mismo estar escuchando un CD de buen blues, lejos del ruido de la ciudad de Madrid, por qué no con una buena copa de vino y escribiendo algo ingenioso para aCERCArme a EL MILAGRO.
...Eso sí, mientras tanto espero que me den cita para entrar en el infierno...
Mi sollll..
qué alegría!...
ahora sí podemos decir QUÉ ALEGRÍA!!!!!..
Besos amiga mia!!!!
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